¿Cuál es la diferencia entre insolvencia y sobreendeudamiento?
La distinción principal entre insolvencia y sobreendeudamiento es que la primera se percibe como más crítica, lo que significa que la situación es más difícil, mientras que en el caso del sobreendeudamiento aún pueden vislumbrarse opciones de mejora.
En otras palabras, primero se presenta el sobreendeudamiento y posteriormente la insolvencia.
A continuación explicamos cada uno de los conceptos y las diferencias más detalladamente:
Diferencia entre insolvencia y sobreendeudamiento
Insolvencia y sobreendeudamiento son dos conceptos muy similares y que tienden a confundirse pues en muchas páginas webs alternan las dos palabras como sinónimos.
Sin embargo existen diferencias que explicaremos a continuación
El sobreendeudamiento se refiere a una situación donde una persona tiene una cantidad de deudas elevada en comparación con sus activos.
Es decir, está muy endeudada en relación con lo que posee. Esta situación es más una cuestión financiera y económica que legal.
Por otro lado, la insolvencia es un estado legal en el que una persona o entidad no puede cumplir regularmente con sus obligaciones de pago.
Es decir, ya no puede pagar sus deudas de manera adecuada.
La insolvencia puede ser una consecuencia del sobreendeudamiento, pero no siempre es así.
¿Qué es endeudamiento y sobreendeudamiento?
El endeudamiento ocurre cuando se solicita dinero prestado, por ejemplo un préstamo personal, con el compromiso de devolverlo en el futuro.
Por otro lado, el sobreendeudamiento se presenta cuando no es posible cumplir a tiempo con el pagos de las deudas y por consiguiente teniendo dificultades para saldar estas deudas.
Causas del sobreendeudamiento
Las causas del sobreendeudamiento son muy variadas y puede derivar de diversos factores como problemas económicos, psicológicos o sociales.
Algunas de las causas más comunes del sobreendeudamiento son debidas a una gestión pobre de las finanzas como consecuencia de tener pocos conocimientos y no tener educación financiera.
También puede ocurrir que haya personas que tomen decisiones irresponsables y compren productos innecesarios o de lujo que cause problemas financieros y que cuanto más elevado sea el estrés financiero, sean más propensas a tener más deudas que no pueden pagar.
Sin embargo existen otros factores extrínsecos que no están relacionados con las características personales, sino que son el resultado de una situación económica y social del país en general.
Por ejemplo, si hay una crisis económica, tanto empresas como personas es posible que tengan que endeudarse aunque antes no tuvieran problemas financieros.
Un ejemplo muy claro lo tuvimos recientemente con el COVID cuando muchas familias en situación de ERTE no podían asumir la cuota de la hipoteca.
Otros factores pueden ser por ejemplo una alta inflación, o situaciones inesperadas como enfermedades o divorcios que desestabilizan la economía personal.
El sobreendeudamiento puede llevar a la exclusión social tanto para las personas como para las familias.
Sin embargo, esta situación tiene solución y aún es posible resolverla, como por ejemplo buscando ayuda a un asesor profesional, familiares o simplemente recalculando y ajustando tu presupuesto personal.
Tipos de sobreendeudamiento
Existen dos tipos de sobreendeudamiento, la principal diferencia está en las causas que lo provocan o empeoran.
Sobreendeudamiento activo o voluntario
El sobreendeudamiento activo o voluntario es cuando una persona contrata préstamos conscientemente, ya sea por necesidad o por una acción irresponsable que va más allá de lo que puede pagar.
Por ejemplo, un sobreendeudamiento voluntario sería si Juan necesita un crédito rápido para poder comprar el material escolar y pagar la matrícula de su hijo de 10 años.
Otro ejemplo sería Maria y Jose, quienes han solicitado un crédito rápido para irse este verano de vacaciones.
A veces, el sobreendeudamiento se relaciona con una adicción por ejemplo una persona adicta a los juegos online de casino o deportistas adictos a productos anfetamínicos, y que entre en un círculo vicioso de deudas.
Sobreendeudamiento pasivo o involuntario
Por otro lado, el sobreendeudamiento pasivo o involuntario ocurre cuando una persona se encuentra en deuda debido a eventos fuera de su control, como perder el trabajo, sufrir un accidente, enfermedades graves, divorcios u otros eventos imprevistos.
En estos casos, la persona no planea endeudarse, pero se ve obligada a hacerlo para enfrentar estas situaciones difíciles.
Insolvencia
La insolvencia, también conocida como estado de quiebra, es una situación legal en la cual una empresa o persona declara jurídicamente que no puede pagar sus deudas.
Esta condición puede ser causada por problemas de liquidez o por exceso de sobreendeudamiento, es decir, cuando las deudas superan los ingresos o activos disponibles, impidiendo a la persona o empresa superar la situación de ninguna manera.
Cuando una persona o empresa se declara insolvente, puede enfrentarse a demandas legales por parte de sus acreedores y a la posibilidad de perder sus activos.
Existen varios tipos de insolvencia, como la temporal de liquidez, la patrimonial y la punible, esta última relacionada con prácticas fraudulentas, si quieres saber más al detalle lo explicamos todo en este artículo sobre la insolvencia.
Para evitar llegar a este estado, es importante tener un plan financiero y estar preparado para posibles emergencias.
¿Qué hacer en caso de sobre endeudamiento o insolvencia?
En caso de insolvencia o sobre endeudamiento es aconsejable realizar un reajuste de las finanzas personales para detectar qué gastos pueden eliminarse.
Buscan asesoramiento de un gestor personal, o reunificar las deudas, puede ser una opción para gestionar mejor los gastos.
Una opción alternativa en caso de insolvencia es la Ley de Segunda Oportunidad, la cual ofrece la posibilidad de un nuevo comienzo.